Ahora en época de navidad, está muy de moda eso de las comidas y las cenas de navidad con el equipo de la ofi o con la familia con la que te reúnes una vez al año. Para esas reuniones, os aconsejo Filandón.
Filandón es el mix perfecto entre la ciudad y el campo a tan solo 5 minutos del centro de Madrid. Tiene varios salones arriba y abajo, un par de terrazas con vistas a lo que casi parece un bosque y hasta columpios en el jardín por si tienes que llevar a los más peques.
Además de esa mezcla campestre-cosmopolita, tiene una decoración cálida que junta cemento y madera y unos colores suaves que invitan a quedarse ahí junto a una de sus chimeneas con un chocolate caliente.
En cuanto a la carta, abunda la selección de pescados y arroces. Desde una croquetas de carabineros (que no me entusiasmaron) hasta los calamares de toda la vida o un arroz con bogavante que estaba para chuparse los dedos…
Yo me pedí uno de mis platos favoritos: Kokotxas al pil pil
Las kokotxas son un plato fácil de hacer y de destrozar, pero ¡me las hicieron estupendamente! ¡Bravo!
Últimamente, vaya donde vaya está lleno de gente…¡cualquiera diría que estamos en crisis! Filandón no fue ninguna excepción. Ni una mesa libre para la comida… no quiero imaginar como estarán los viernes por la noche. Como siempre, lo malo de esto es el servicio, que tiene que estar tan pendiente de tantas mesas que no lo está de nadie…
Filandón es el restaurante perfecto para impresionar al futuro suegro/a o al jefazo de turno… si tenéis ocasión, ¡no os lo perdáis!
¡Hasta la próxima, glotones!
Carretera Fuencarral-El Pardo (M – 612) Km. 1,9 – 28049 Madrid