Ayer, aprovechando los rayos de sol que había en Madrid (justo antes del chaparrón), tuve la oportunidad de pasarme por la tienda de Salvador Bachiller de la Calle Montera.
En la cuarta planta de la tienda, está el Jardín Secreto, un espacio que te enamora nada más verlo.
Lo primero que nos encontramos es el salón de té que tiene un ambiente oscuro y acojedor. Lo que más apetece es pedirse un té con pastas y ponerse a leer un buen libro.
Una vez pasas el salón de té subes unas escaleras que te avisan que estás llegando al Jardín Secreto, y cuando pasas la puerta que hay al final de la escalera entras en un jardín completamente mágico y encantador.
Lo primero que ves cuando subes es la cantidad de flores, plantas y colores que invaden un espacio no muy grande. Mesas de jardín preciosas, balancines, sillas y mesas altas de madera…el espacio tiene todos los componentes necesarios para que te enamores del lugar.
Los tés y cafés, además de estar muy buenos, vienen siempre acompañados de croisants pequeños de mantequilla o pastas de té que están para chuparse los dientes.
Entre otras de sus ricas especialidades están las tartas.
Además este mágico espacio está abierto hasta la 1 de la mañana de jueves a sábado, así que creo que la próxima vez que vaya será por la noche para disfrutar de las noches madrileñas al máximo.
Con el buen tiempo que se acerca, no hay nada como una buena terraza, y la del Jardín Secreto de Salvador Bachiller es una de las MUST de este verano.
El Jardín Secreto de Salvador Bachiller
Calle Montera 37